Ermita de
Nuestra Señora del Castillo (Tamariz de Campos) |
A unos dos kilómetros de la villa de Tamariz y en un alto está la ermita, edificio grande, con atrio en un lateral. Tiene tres naves, cubiertas con bóvedas de arista, que en la nave central ocultan un artesonado del siglo XVI bastante deteriorado, que tenía decoración de estrellas y en los laterales los escudos de los Velasco. Hasta hace algunos años el edificio tenía adosado al este la casa del ermitaño, donde más recientemente, cuando ya no había ermitaño hacían la merienda los cofrades en la fiesta de la Virgen.
El 8 de septiembre celebra su fiesta la Cofradía de Nuestra Señora del Castillo, también llamada "de los Pastores", por ser este gremio quien tradicionalmente la formaba. Dice la tradición que fue un pastor quien descubrió la imagen en un pozo. Antiguamente había un ermitaño, que se ocupaba también como pastor de un rebaño propiedad de la cofradía.
El domingo siguiente al 8 de septiembre se celebra la fiesta del Voto, voto de villa en acción de gracias a la Virgen del Castillo, acudiendo vecinos y visitantes a la ermita.
Así se podía ver antiguamente la entrada de la Ermita. Esta espadaña desapareció a mediados del siglo XX, posiblemente en la década de los 50 o los 60, aunque sigue existiendo en el interior de la ermita el agujero por el que pasaba la cuerda para tañir la campana. En la década de los 90 se volvió a reconstruir una espadaña sobre la puerta, que duró pocos años, hasta la reforma del año 2002.
En la imagen superior, una vista de la Ermita en los años 90, antes de que reconstruyeran la espadaña sobre la puerta.
En las fotografías superiores, un detalle de la puerta y procesión. Fotografías tomadas en los años 90.
Entre los años 2002 y 2004 se reformó la Ermita, con un generoso donativo de 180.000 euros, construyendo un campanario al pie, ampliando y cerrando el atrio, recubriendo el ladrillo con cemento, borrando las inscripciones existentes de anteriores donantes (una que existía el el interior sobre la puerta de entrada, otra que había en el coro y otra pintada en el retablo) y se levantó y reformó completamente el tejado. En los años siguientes se observó que la obra no se había realizado correctamente, por lo que el edificio estaba en peligro, y se tuvo que realizar de nuevo una importante reforma del tejado, tras la cual se abrió de nuevo la ermita en septiembre de 2016.
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